Un escenario que está totalmente fuera de mi control son los desastres naturales y esto me generaba mucho miedo, durante un tiempo preparar mi mochila de emergencia fue una prioridad.
En una ocasión mientras estaba en casa comenzó a temblar y de inmediato pensé ¡Mi mochila! Y en medio del temblor fui a buscarla y al intentar sacarla del armario, se atoró, en ese momento toda mi familia ya había desalojado la casa y me llamaba y me llamaban y yo seguía aferrada a la mochila, en ese momento tuve que decidir Soltar y salvarme.
Y así como este ejemplo, hay situaciones en la vida que nos ponen a prueba, siempre recuerdo esta experiencia cuando estoy aferrada a una situación que es como la mochila en la cual tenía expectativas, me daba seguridad tenerla y además estaba diseñada para esa situación en específico ¿Cómo iba a soltarla? ¿Cómo suelto una situación? Primero entendí que la prioridad #1 soy yo, la mochila de emergencia no está mal pero hay que ser flexible, hay que aprender a confiar en la vida.
Así que ahora, cada que estoy en una situación en la que identifico que estoy enganchada y observo una resistencia, la suelto y realmente casi de inmediato y como por arte de magia se resuelve, en cuanto solté la mochila esta se desatoro, la formula fue:
(observación+entendimiento+ soltar)/resistencia = Solución
Para esta semana te invitamos a que pienses en una situación difícil de tu vida y observes ¿Hay alguna resistencia que no me está dejando fluir libremente?
Ideas compartidas por Lizbeth Alexis Manzanares Guevara, de 26 años, que es voluntaria de BK en Tijuana, México. Alexis es Ingeniero en nanotecnología.